La técnica, que proviene de Estados Unidos, se llama Presorvac y permite conservar la calidad del vino durante 15 días después de abierta la botella
Cinco de las bodegas más importantes de Tenerife se han aliado para poner en marcha, por primera vez en Canarias, una novedosa tecnología de vacío que permite conservar la calidad del vino hasta quince días después de abierta la botella. Llega directamente de los Estados Unidos, se llama Presorvac y, este lunes, los propietarios de las bodegas Frontos, Tajinaste, Monje, Brumas de Ayosa y Viñatigo, la presentaban como “piedra angular” de la campaña “Calidad x Copas”.
Con el respaldo de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Santa Cruz de Tenerife,. De esta manera, recoge uno de los retos planteados por la “Estrategia Vino 2010” del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para fomentar nuevos modos de consumo a través de sistemas de cierre y comercialización que favorezcan la venta y las cartas de vino por copas.
En este sentido, los bodegueros canarios han apostado por innovar con una técnica sencilla, fácil y rápida de usar. De hecho, según explicó el director técnico de la campaña “Calidad x Copas”, Juan Carlos Hernández, el Presorvac es un dispositivo que, una vez abierta la botella, permite frenar la oxidación del vino, mediante un sencillo tapón-válvula que crea en pocos segundos un “vacío óptimo”, sin alterar su aroma, sabor y calidad.
Entre los objetivos de “Calidad x Copas”, se encuentra también romper con la idea de que los vinos canarios son caros y de baja calidad y mejorar el volumen de ventas de los caldos del Archipiélago, que en el último año se ha visto drásticamente mermado, sobre todo, por el impacto de la crisis económica.
Durante la presentación de la campaña, a la que asistieron los representantes de cinco de las bodegas más importantes de Tenerife como son Frontos, Tajinaste, Monje, Brumas de Ayosa y Viñatigo, Fernando Luengo, Agustina Farrais, Felipe Monje y Francisco J. Gómez y Jesús Méndez Siverio, respectivamente, se explicó que hasta el momento se han sumado 15 bares y restaurantes de la Isla, aunque una veintena más están a la espera de incorporarse.
La campaña “Calidad x Copas” cuenta con una página web (calidadxcopas.com) en la que se detallan la ruta de los restaurantes y tascas que participan, así como las bodegas y las características de los vinos que se pueden degustar. En cada uno de los restaurantes, se ofrece una carta que incluye diez de las variedades más importantes de estas bodegas, una selección de vinos que “irá renovándose en función de la temporada y los menús”, según informó Juan Carlos Hernández, director técnico de la campaña.
Según Méndez Siverio la venta de vino por copas es “un sistema que ya funciona con mucho éxito en países como Estados Unidos, Alemania o Inglaterra, en donde el 50 por ciento del vino se vende por copas y su consumo se ha llegado a situar incluso por encima del de la cerveza”.
A su juicio, Calidad X Copas ofrece al consumidor varias ventajas. Una de ellas es el precio, porque le permite disfrutar de una copa de buen vino pagando una media de entre 2 y 3 euros y acceder a caldos que antes no se planteaba conocer simplemente por el coste de la botella. Además, puede tomar distintas variedades de vino a lo largo de una misma comida
Otra de las novedades de esta iniciativa es que abre la posibilidad de convertir en vinotecas a los establecimientos que participan, al tener la opción de vender “para llevar” las botellas de los vinos presentes en la carta a un precio competitivo. De esta manera, “damos una doble oportunidad tanto al consumidor como al propio establecimiento: cata y compra”, apunta Juan Carlos Hernández.
PRESERVAR CALIDAD.
El servicio de vinos por copa siempre presentaba un problema para el hostelero: la conservación. Un vino abierto se estropea en unas 24 horas por el contacto con el aire. Cuantas más botellas abiertas, más riesgo hay de mermas y, lo que es peor, de servir una copa de vino en malas condiciones, explicó Juan Carlos Hernández.
Sin embargo, cinco de la bodegas más prestigiosas de Tenerife, Frontos, Tajinaste, Monje, Brumas de Ayosa y Viñatigo han apostado por un dispositivo que mide con gran precisión el nivel de vacío creado, sin utilizar sustancias extrañas al vino ni gases que podrían alterar su sabor.
Asentado desde hace años en muchos países extranjeros, el consumo de vinos de calidad por copa quiere abrirse un hueco importante en Canarias a través de este proyecto piloto que arranca en Tenerife con la iniciativa “Calidad x Copas”,
Para el presidente de la Cámara, Ignacio González Martín, esta iniciativa es “una gran oportunidad tanto para bodegas y restaurantes como para los propios consumidores, ya que el sector consigue vender más vinos de gama alta al facilitar que los clientes los prueben sin tener que comprar una botella entera. El consumidor también sale beneficiado al poder probar más y mejores vinos”.